FAQ
Mientras se hace descender el saco, a veces este oscila levemente de forma que el FLEDBAG® lo penetra un poco inclinado. Gracias a su flexibilidad, el mango plegable cede y se evitan roturas.
Debido a las grandes fuerzas que debe soportar el FLEDBAG®, es fundamental que se mantenga estable. El tornillo de unión situado entre el vaciador y la compuerta está empotrado. Esto permite colocar el FLEDBAG® de manera plana sobre el suelo.
El FLEDBAG® Original es un dosificador pensado fundamentalmente para súper-sacos de un solo uso. Cuando se retira, el tejido del saco queda rasgado. Naturalmente, el FLEDBAG® Original también se puede utilizar con súper-sacos reutilizables, solo que tras su uso el tejido queda rasgado. Además, hay que tener en cuenta que el FLEDBAG® Original no se introduce centrado en el súper-saco ni, en el caso de sacos reutilizables, a través de la boca de salida. Para súper-sacos reutilizables recomendamos usar el FLEDBAG® Easy, un sistema que no rasga el tejido del saco y, por tanto, permite volver a usarlo.
Después de usar el FLEDBAG® Original, hay que cortar el súper-saco. Naturalmente, también se puede dejar el FLEDBAG® Original introducido en el saco y almacenarlo así.
Solo tiene que soltar el anillo y retirar el FLEDBAG® Easy. De esta forma, podrá volver a usar el saco reutilizable.
Sí, se puede dejar el FLEDBAG® introducido en el súper-saco y almacenarlo así.
En función del contenido del súper-saco, podrían permanecer restos en su interior. Una vez haya extraído el FLEDBAG®, podrá terminar de vaciar el saco.
Usados correctamente, FLEDBAG® Original y FLEDBAG® Easy tienen una vida útil ilimitada. Lo importante es que el saco no contenga grumos.
El FLEDBAG® Original y el FLEDBAG® Easy se pueden usar para materiales en forma de granulado suelto desde 1 hasta aproximadamente 20 mm. El FLEDBAG® Easy también es adecuado para materiales en polvo.